Gustavo Jarrin Ruales

Nace en la parroquia “ El Sagrario” de la ciudad de Ibarra el 20 de Agosto de 1917 Hijo legítimo de Don Carlos Jarrín Cadena, Cayambeño y de Doña María Clementina Ruales Lara, mireña, radicada por ese entonces en Ibarra.

Sus estudios primarios los realiza en la escuela “La Salle” de los Hermanos Cristianos, se destacó, como un alumno brillante, por lo que obtiene la medalla de oro al mejor egresado. Posteriormente se traslada a la floreciente y bella parroquia de Mira, cuna de su progenitora, para asistir desde aquí al colegio Normal José Julián Andrade de la ciudad de San Gabriel, donde realiza sus estudios secundarios en compañía de Leopoldo Padilla y Vicente Carrera, con quienes comparte diferentes vivencias de juergas y travesuras propias de su fervorosa juventud. Es aquí donde conforma el famoso dúo Padilla-Jarrín que con sus preciosas serenatas hicieran suspirar y enamorar a más de una candorosa flor mireña; cuántos balcones y hogares no trasnocharían escuchando sus hermosas voces al compás de un pasillo un valse o un bolero; “negra mala” era el preferido.

A los veinticinco años contrae matrimonio con la espiritual y distinguida mujer mireña, doña María Eudocia Gudiño Clavijo con quien procrea seis hijos: Luis Bayardo, Sarita Argentina, Flor Alba, “Oscar Felipe y Rady Cecilia”, fallecidos y Amílcar Felipe.

Ingresa al Magisterio Nacional en el año de 1940 Diferentes parroquias carchenses, acogen con beneplácito las enseñanzas de su preclara inteligencia; es el maestro por excelencia, el guía y orientador de la niñez y juventud, el consejero familiar, el organizador, el asesor legal en asuntos de cooperativismo o conformación de juntas, clubes, y otras entidades públicas, conocedor de leyes, estatutos y reglamentos, en lugares apartados y desposeídos de los más elementales servicios, funge hasta de boticario es el curandero que elabora medicamentos caseros que ofrece gratuitamente a quienes recurren en auxilio de sus dolencias propias de la gente humilde de estos lugares.

El amor a los desposeídos y su personalidad de líder nato, le impulsa desde su juventud a afiliarse al partido Socialista del Ecuador, sus principios ideológicos son tan arraigados que se convierte en un vigoroso, acérrimo e infatigable defensor de las libertades de los pobres, sus luchas personales y colectivas contra las injusticias y buscando días mejores para su gente lo llevan siempre en esa dirección, estuvo en contra de los ricos, terratenientes y hacendados cuando veía desigualdades, igualmente en contra de los gobiernos locales , cuando encontraba malversación de fondos y usufructo para intereses personales.

Es el Maestro acrisoladamente honrado, eficiente y correcto, el cumplidor de sus obligaciones a costa de los más grandes sacrificios, el que tenía que laborar en sus jornadas incansables en las escuelas de los más lejanos lugares, el que tenía que llegar a su sitio de trabajo en mula, a caballo o caminando por largas horas del día o de la noche, con sol o con lluvia. Es el amigo sincero, fiel y bondadoso, es el ciudadano respetuoso y honesto, Es el esposo y padre amoroso y responsable el que se negaba a si mismo en un par de zapatos nuevos por entregar todo su sueldo para la administración familiar.

En su vida docente aplica todo su acervo de conocimientos, se entrega ardorosamente a las labores de enseñar, educar y formar a la niñez en el campo académico, cultural, musical, social pero fundamentalmente en el campo ético y moral.

Comienza su carrera docente en la parroquia de San Isidro y la Libertad, posteriormente es designado Director-Profesor en la Concepción , por sus luchas clasistas y por denuncias de sus detractores políticos, fue suspendido temporalmente por un año en el Gobierno del Dr. José María Velasco Ibarra, año en el cual se dedicó conjuntamente con su esposa a apoyarle en la administración de la Hacienda de San José a su suegra Doña Rosa Clavijo. Se reintegra al magisterio, pero es trasladado como Profesor a la parroquia del Pun actualmente el Carmelo en la frontera con Colombia, para luego ser trasladado a la Parroquia de Juan Montalvo y por último es designado como profesor de la Parroquia de Mira.

En cada lugar, va dejando la huella indeleble de su recia personalidad y de su trabajo siempre desinteresado, pero fecundo y progresista.

En Mira dedica los mejores años de su vida productiva, como docente de la prestigiosa escuela Rafael Arellano # 81 pero también entrega todo su talento, capacidad y esfuerzo al servicio de la colectividad mireña, desempeñando cargos importantes en la sociedad tales como:

  • Presidente de la Junta de Aguas de riego
  • Presidente de la Junta de Mejoras Locales
  • Presidente de la primera Junta Parroquial
  • Concejal del Cantón Espejo y
  • Presidente de la Junta Cívica Pro-Cantonización de Mira

Sus actividades y obras más relevantes de sus diferentes épocas son:

  • Limpieza y ensanchamiento de las acequias que riegan la fértil tierra mireña, con la finalidad de aumentar la productividad agrícola.
  • Construcción total del sistema de agua potable desde su captación hasta los tanques de potabilización y distribución , para el uso del pueblo.
  • Construcción de lavanderías, servicios higiénicos, piscina y baños públicos, además de piletas con llaves de agua para uso comunal.
  • Construcción del alcantarillado de la población.
  • Con el apoyo del Consejo Provincial del Carchi y su maquinaria vial, construyó caminos vecinales y mejoró las vías carrozables que unen a la Población de Mira con San Isidro, Juan Montalvo, La Concepción, la Comunidad, El Hato, Las Parcelas, y San Nicolás de Mira..
  • Construcción de la Casa del Pueblo, edificio en el cual funcionara la Junta Parroquial, que posteriormente se reconstruyera debido a un incendio que devoró parte de esta construcción y en el que labora el actual Concejo Municipal.
  • Gestión, consecución y colaboración en la electrificación de la Parroquia con la participación directa de la Empresa Eléctrica Regional del Norte.
  • Mejoramiento y adecuación del estadio Galo Plaza Lasso, donde la niñez y juventud del pueblo practicaran deportes como fútbol, voleibol, y pelota de guante.
  • Reconstrucción del parque central Juan Montalvo, pavimentación y mantenimiento. – Mejoramiento y adecuación de la plaza “ Alfonso Herrera” que serviría de mercado o feria libre.
  • Construcción y dotación de la cancha de Básquetbol del colegio León Ruales.
  • Dotación de instrumentos musicales a la Banda nueva del pueblo y capacitación de los intérpretes con un director musical profesional.
  • Gestiona ante el Ministerio de Obras Públicas el paso del tramo asfaltado de la variante de la panamericana Norte, por la parroquia de Mira.
  • Y por último habiendo sido designado por el pueblo, como Presidente de la Junta Cívica Pro-cantonización de Mira; y con el apoyo y colaboración irrestricta y decidida de ilustres mireños, Como Abdón León Muñóz, Hugo Arboleda Ruales, Prof. Guadalupe Villagómez de Arboleda (nc.Tulcán), Alfredo Palacios Lara, Rigoberto Lara, Carlos Alberto Ramírez, Joaquín Cabezas, Arsenio Ruales, Marco Chávez, Jorge Andrade, Jaime Caicedo (Pimampiro), Dr. Wilson Sánchez (nc.Tulcán), Sor. Ana Nohemí Altamirano (nc.Ambato), Fabián Ruales, Segundo Paredes, Pedro Valverde, Carlos Mafla , Octaviano Navarrete, Victoriano Andrade, Dr. Joaquín Leon, Alfredo Urresta, Nery Ruales, entre otros no menos importantes, y la ayuda directa de la Colonia Mireña residente en Quito , presidida por el notable mireño Don Jorge Arboleda Ruales, Y los distinguidos Dr, Pedro Mosquera, Abdón Mosquera, Dolores Urresta, Maruja Fraga, Sonia Urresta, Washintong Arévalo (nc.Quito), Jorge Calderón, Telmo Castillo, y del Doctor Marco Proaño Maya (nc.Ibarra), Diputado en ese entonces por la Provincia de Imbabura, gestiona, impulsa y conquista a base de grandes esfuerzos, sobrepasando ideas contrarias y mezquinas de algunos afuereños y del mismo lugar, por cinco ardorosos años de lucha con la juventud y un buen grupo de ciudadanos que lo seguían, el más preciado triunfo de ver a su querido terruño, sin ser un mireño de nacimiento, pero sí de corazón, erigido a la categoría de Cantón de la Provincia del Carchi, el 18 de Agosto de 1980 siendo Presidente del Ecuador el Doctor Jaime Roldós Aguilera y del Congreso Nacional el Señor Don Assad Bucaram.

A partir de este logro tan anhelado y una vez cumplida la tarea docente, se acoge a la Jubilación del Magisterio y sin esperar absolutamente nada como era su característica, se radica en la ciudad de Quito, con su salud ya quebrantada, hasta que culmina su ejemplarizadora y preciosa existencia , en medio de su adorados esposa, hijos, y nietos el 18 de Diciembre de 1998 a la edad de 81 años.

Cuántos de sus muchos allegados, amigos, discípulos, parientes y detractores políticos, lo recuerdan todavía con respeto y admiración.


Biografía proporcionada por el Sr. Felipe Jarrín Gudiño.

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