El Dr. Alfonso Herreras Padilla, nace en la Hacienda Huaquer de San Nicolás de Mira, el 7 de febrero de 1890. Sus padres fueron el señor don Abrahán Herrera y la Sra. Clara Padilla. No contrajo matrimonio. Tuvo un hijo, el Dr. Enrique Proaño, abogado de la República y Notario Público en la Provincia de Imbabura.

Los estudios primarios los realizó en las Escuelas “Bolívar” y “Eugenio Espejo” de la ciudad de El Ángel, la secundaria en el Colegio “Teodoro Gómez de la Torre” de la ciudad de Ibarra y los superiores en la Facultad de Medicina de la Universidad Central del Ecuador, en la que obtuvo el título de médico.

Se distinguió por su amor a la patria, especialmente a su cantón. Fue uno de los principales gestores de la cantonización de El Ángel. Ocupó varios cargos públicos como: Primer Jefe Político del Cantón Espejo, Gobernador de la Provincia del Carchi, Diputado del Congreso Nacional, Presidente del Concejo Cantonal de Espejo (1944-1945).

Su preocupación constante fue la vialidad, la salud y la educación. A su tierra natal Mira, donó una plaza que llevaba su nombre y en la cual posteriormente se construyó lo que es hoy el Centro de Salud de Mira, además donó una casa para dispensario médico, sitio en el que actualmente está construida la Casa del Jubilado, por un comodato realizado con el Ministerio de Salud.

Para la educación de la juventud del cantón donó sus propiedades en la ciudad de El Ángel, en donde crea el Colegio Agropecuario que hoy es el Instituto Superior Tecnológico “Alfonso Herrera”, además lega en su testamento la mitad de la Hacienda “San Jerónimo” al colegio y deja una cantidad de dinero para que se conceda becas a los estudiantes de escasos recursos.

Fue un hijo dócil y amoroso, que correspondió al desvelo de sus padres. Fue un ciudadano ejemplar, en la mejor acepción de la palabra, útil a la sociedad en todo momento, sirviendo siempre con honradez y sinceridad.

Ejemplo de virtudes, filántropo honesto y patriota, entregó sus bienes para el bienestar social y cultural de su cantón. Ejemplo de altruismo, para todos aquellos que lo tienen todo y lo reciben todo de la sociedad y no dan nada en beneficio de su tierra.

Falleció en la ciudad de Ibarra en 1950, a los 60 años de edad.

Biografía proporcionada por el Colegio Alfonso Herrera