Las artesanías de Mira se han caracterizado por ser muy importantes para el crecimiento económico y social de la población. Un gran ejemplo de esto es la producción de los Sacos de Lana de Oveja.
SACOS DE LANA DE OVEJA
En el año 1964 dos voluntarios del Cuerpo de Paz, Emily y Peter Gladhart llegaron a Mira para ayudar a una comunidad pobre y desesperada.
Antes de la llegada de Emily sólo un poco de gente sabía cómo tejer y lo hacían por su cuenta, sin buenos acabados y para uso personal o familiar.
Ante la necesidad de crear fuentes de trabajo y dándose cuenta de que había mercado para los sacos de lana de borrego, Emily comenzó con clases semanales de tejido a más de 40 mujeres que asistían regularmente a las clases, dando inicio a una actividad que ayudó notablemente en el desarrollo socio-económico de nuestro pueblo.
En aquel entonces el grupo de artesanas tenían un arduo trabajo, ya que realizaban todo el proceso para la elaboración de los sacos, es decir, trasquilar la lana o comprar lana cruda, lavarla, cardarla, hilarla y luego tejerla, además al no disponer en aquel entonces de tinturas para teñir la lana, los sacos se los elaboraba sólo en color negro, gris y blanco y ocasionalmente café, tinturando la lana con tocte (nogal).
Ante la necesidad de buscar mercado para la venta de los sacos, mejorar el precio, conceder las facilidades necesarias a las tejedoras en cuanto a modelos, diseño, materia prima, etc., a comienzos de 1966 se constituyó la primera Cooperativa de “Manufacturas Mira”, la misma que estaría conformada en sus inicios por las siguientes socias:
COOPERATIVA DE MANUFACTURAS MIRA
Elisa Ulloa de Padilla Presidenta Etelvina Lara Vicepresidenta Nely Arboleda Tesorera Aura Garrido Secretaria Emperatriz Mafla Cruz Rosero Rosa López Lira Cabezas Policarpa Mena Dina Estacio Antonia Mafla Liva Chicaz Esperanza Valverde Zoila Méndez Martha Ruiz Rosa Elena Mafla Isabel Palacios Carmela Jaramillo |
Rosa Jaramillo Piedad Ulloa Zoila Mafla Amada Jaramillo Zoila Guerrero Aída Muñoz Zoila Ruales Blanca Estacio Sara Mafla Cruz Jurado Luisa Carrera Josefina Ruiz Beatriz López Fanny Calderón Dolores Andrade Eugenia Orquera Teresa Andrade Elsa Onofre Feliza Portilla Yolanda Calderón Adriana León Isolina Delgado Judith Ruales Beatriz León |
Ya constituida la cooperativa se buscó mercado en Quito; Emily y Peter con miembros de la cooperativa vendían los sacos a la entrada de las embajadas, en las ferias artesanales, en los almacenes OCEPA y a extranjeros que llegaban hasta nuestro pueblo.Los botones utilizados para los sacos eran hechos de la corteza del coco a los que se les daban diversas formas y sacaban brillo con ladrillos. Este trabajo era realizado por los hombres en forma artesanal.
La demanda crecía, en el lapso de un año, las mujeres estaban haciendo más de un centenar de sacos al mes. Pronto el pueblo se transformó. Ahora la gente tenía dinero para mejorar su forma de vida. Peter y Emily regresaron a los Estados Unidos en Octubre de l966, dejando un gran recuerdo y la eterna gratitud de un pueblo que no los olvida.
Transcurrido el tiempo, los indígenas otavaleños, ante este nuevo mercado, proporcionaban la lana ya lista para tejerla, lo que en cierto modo fue un alivio para las sacrificadas mujeres, además empezaron a utilizar los colores, dando lugar a nuevas creaciones. Pero, al mismo tiempo, los indígenas, conocidos por su habilidad en los negocios, empezaron tanto a tejer como a vender los sacos como producto otavaleño, cortando así la posibilidad de que los sacos sean conocidos a nivel internacional como artesanía netamente mireña.
En 1979, los Gladharts regresaron a Mira y realizaron una investigación que reveló que más de mil familias en las provincias de Carchi e Imbabura produjeron 6.000 suéteres al mes, de los cuales entre 50 y 75 por ciento fueron exportados a varios continentes.
En la actualidad, si bien es cierto se siguen elaborando sacos en Mira, la producción se ha ampliado por diversos sectores del país, creciendo la competencia y debilitando los ingresos económicos por este concepto.
Antes de la producción artesanal de sacos de lana de borrego, en Mira sólo se realizaban alpargatas, sombreros, cobijas o tejas pero únicamente para cubrir las necesidades de la gente del lugar y no como producción comercial, las mismas que en la actualidad han desaparecido.
FIGURAS DE MAZAPAN
Otra actividad artesanal temporal e independiente de Mira, son los borregos de mazapán en miniatura que se los realiza en época de Finados. A esta artesanía se dedica actualmente una sola persona, la señorita Laura Elisa Jaramillo (+) quien heredó este arte de su difunta madre, doña Rosa Granda, y que lastimosamente nadie más sabe elaborarlos.
Señorita Laura Elisa Jaramillo
Madre e hija, Sra, Rosa Granda (+), y Srta Laura Elisa Jaramillo (+)
Estos borreguitos se los adquiere para obsequiar a los amigos en esta época del año ya que son la versión en miniatura de los borregos de pan que se acostumbra a hacer en finados para obsequiar a los niños.
ARTESANIAS DE ARCILLA GAEN
Aproximadamente en el año 1999, nace una actividad artesanal que se está desarrollando en el Caserío de Mascarilla, con la elaboración de máscaras de barro cocido que tienen un estilo afro-ecuatoriano. A esta actividad se dedican especialmente las mujeres y en ella plasman toda su creatividad, sus emociones, gestos, personajes y sentimientos.
Actualmente GAEN (Grupo Artesanal Esperanza Negra) está incursionando en la elaboración de otros artículos utilitarios como: ceniceros, collares, jarrones, platos, etc. que gustan mucho a los turistas nacionales y extranjeros. Además están empeñados en recuperar todo el bagaje cultural afro-ecuatoriano, a través de diversas técnicas creativas, que permitan además sustentar en algo las débiles economías de las comunidades negras de la zona.
En Mascarilla existe un almacén en donde se exhiben y se pueden adquirir estas artesanías.
Más información: GAEN
ARTESANIAS DE ARCILLA ZANCOFA
En San Juan de Lachas, Parroquia Jacinto Jijón y Caamaño, también existe un grupo de artesanos que elaboran utensilios en cerámica (barro cocido), llamado ZANCOFA.
Ahí se pueden encontrar variedad de objetos como: cofres, ceniceros, jarrones, fuentes, platos, candelabros, jarros, etc. que llevan plasmados toda la creatividad e inspiración de quienes los elaboran. Además se ha complementado estos objetos con el uso de la paja rámpira en algunos detalles, realzando la belleza de estas creaciones.
Este grupo tiene una pequeña muestra permanente en el MIPRO en Quito y un almacén en su propia tierra, al que acuden turistas nacionales y extranjeros para apreciar y comprar estos originales objetos de cerámica.
Actualmente estas artesanías de las zonas afro-ecuatorianas están en proceso de exportación a varios países, tanto de América como de Europa.